viernes, 9 de octubre de 2015

LA ECONOMÍA DE EGIPTO

LA ECONOMÍA DE EGIPTO

La economía de Egipto se socializó tras la promulgación de una serie de leyes a comienzos de 1961. El gobierno se hizo cargo del comercio exterior, el comercio al por mayor, la banca, los seguros y la mayoría de las industrias. Aunque la agricultura, los bienes raíces urbanos y algunas fábricas siguieron en manos privadas, se impuso una regulación estricta. Un plan quinquenal introducido en 1960 causó una considerable expansión de la industria y un incremento de la producción. El plan se sustituyó en 1965 por otro de una duración de siete años que no tuvo tanto éxito, en parte debido a la insuficiente inversión extranjera; en compensación, se introdujo en 1967 un modesto plan trienal. Las bajas sufridas durante la Guerra Árabe-israelí en junio de 1967 y el desajuste económico general que persistió después, retardaron gravemente el desarrollo económico y social.



Los males de la economía egipcia fueron una de las razones principales para conseguir la paz a finales de la década de 1970, porque el país no podía costearse otro enfrentamiento militar. Aunque la economía creció rápidamente durante finales de la década de 1970 y principios de la siguiente, el hundimiento de los precios del petróleo a mediados de la década de 1980, seguido por la crisis del Golfo Pérsico de 1990, dejó a Egipto en una difícil situación financiera, a la que se añadían el pago de los intereses de la ayuda extranjera que a mediados de la década de 1990 ascendían a 4.000 millones dólares. Egipto respondió con la privatización de más de 300 compañías estatales y la aplicación de reformas estructurales.
El presupuesto nacional estimado para 1995 constaba de 20.909 millones de dólares de ingresos y de 20.249 millones de dólares de gastos. El producto interior bruto (PIB) era de 75.605 millones de dólares (1997).

Agricultura

Egipto es un país predominantemente agrícola, donde un 40% de la mano de obra está vinculada a la agricultura o la ganadería. La forma de propiedad fue muy alterada por la Ley de Reforma Agraria de 1952, que limitó las posesiones individuales a unas 80 ha, un tamaño que se revisó en 1961 a unas 40 ha, y se hizo de nuevo a la baja en 1969 hasta 20 ha. Las tierras requisadas por el gobierno se repartieron a los fellah (campesinos), pero todavía persisten diferencias económicas entre los propietarios agrícolas de clase media y los fellah.
Los rendimientos de las explotaciones agrarias están entre los más altos del mundo. Egipto es el productor más importante de long-staple (fibra de algodón). La producción de algodón en 1998 fue de 850.000 t. Los rendimientos de maíz están también entre los más altos del mundo, con una producción anual que alcanza los 5,33 millones de t. Otros cultivos importantes son la caña de azúcar (13,8 millones de t), trigo (6,09 millones de t), arroz (5,59 millones de t) y hortalizas (12,2 millones de t). También se producen sandías, mijo, cebada, cebollas, cítricos, mangos, dátiles, higos y uvas.
La ganadería, en 1998, se componía de 3,18 millones de cabezas de ganado vacuno, 3,15 millones de bueyes, 4,30 millones de ovejas, 3,20 millones de cabras, 1,72 millones de asnos y 103 millones de aves de corral.



Pesca

Egipto tiene una industria pesquera significativa. En 1996 la captura anual era de 309.576 t. Entre las áreas mas productivas están las lagunas deltaicas poco profundas, Birkat Qarun y el mar Rojo. Las capturas de sardina por la costa mediterránea, en tiempos pasados muy productivas, han quedado muy reducidas desde la construcción de la presa de Asuán. Se está desarrollando la industria pesquera en el lago Nasser.

Minería

La producción anual de crudo de petróleo, el producto mineral más importante de Egipto, era de unas 3,8 millones de t a comienzos de la década de 1960. A causa del descubrimiento en las décadas de 1950 y 1960 de grandes campos petroleros en el-Alamein y en las áreas del golfo de Suez, junto a una mayor explotación en la década de 1970, la producción anual de crudo de petróleo se incrementó hasta 313 millones de barriles en 1997. También se producen al año 13.500 millones de m³ de gas natural. A mediados de la década de 1970 un consorcio italiano construyó un oleoducto para llevar 80 millones de t de petróleo al año desde el golfo de Suez hasta el mar Mediterráneo.
Moneda y banca
La unidad monetaria es la libra egipcia, dividida en 100 piastras (3,39 libras egipcias equivalían a 1 dólar en 1997). El Banco de Egipto, creado en 1961, controla la actividad financiera de bancos estatales y comerciales y la emisión de billetes. En el país operan más de 200 bancos nacionales y extranjeros.

Comercio exterior

Las principales importaciones de Egipto son productos agrícolas y alimentarios, equipos de transporte, productos químicos, maquinaria para minería y cantería y productos metalúrgicos. Los principales suministradores son Estados Unidos, Alemania, Italia, Francia y Japón. A causa del rápido crecimiento de la población, el país se ha hecho cada vez más dependiente de las importaciones, en especial de alimentos, sobre todo trigo, harina y carne. Las exportaciones principales son petróleo y productos derivados, algodón sin elaborar, tejidos e hilo de algodón y productos alimentarios. Los principales socios comerciales para éstas y otras exportaciones son Italia, Rumania, Alemania, Gran Bretaña, Francia y Japón.
A pesar de las inversiones a gran escala y de los estrictos controles gubernamentales, Egipto tiene un déficit destacado en su balanza de pagos. Las principales fuentes de divisas las proporcionan las ventas de algodón, petróleo, los ingresos que proporciona el paso de barcos por el canal de Suez, el turismo y la ayuda exterior. A finales de la década de 1970, los ingresos se incrementaron tras la reapertura del canal de Suez y el acuerdo de paz con Israel, que permitió la entrega del territorio ocupado del Sinaí (que contiene yacimientos petrolíferos). La deuda externa con los países occidentales, a mediados de la década de 1990, ascendía a 10.000 millones de dólares. El crónico déficit comercial de Egipto se incrementaba a un ritmo de 2.750 millones de dólares anuales a comienzos de la década de 1990. En 1996 las exportaciones suponían 3.535 millones de dólares y las importaciones 13.019 millones de dólares.



Transporte


Egipto cuenta con 4.810 km de tendido ferroviario, todos de propiedad estatal. La línea principal enlaza Asuán con los puntos en el norte del valle del Nilo, hasta llegar a Alejandría, en la costa mediterránea. Los canales del Nilo, navegable por todo su curso en el país, conforman 1.610 km para la navegación, y los más de 17.000 km de canales de regadío, en el delta del Nilo, son muy usados para el transporte. Se utilizan caravanas de camellos en el desierto.

“Una de las ramas más importantes de la economía egipcia es el turismo. No hay bikinis, sin turismo. Así que tienen que decidir qué hacer”.- Shimon Peres

COMENTARIO
La base económica de Egipto fue la agricultura, que dependía estrechamente del Nilo. Para lograr que los efectos de la inundación fueran favorables, se la debió encauzar y dirigir. Para ello, se llevó a cabo una importante labor de obras públicas hidráulicas. Se levantaron diques, se construyeron canales y acequias.
En el sistema de cultivo, se alternó el cereal con las leguminosas y se llegó a recoger dos cosechas anuales. El arado tirado por bueyes, la hoz y el trillo fueron útiles normales en la labor del campesino.
El egipcio se veía obligado a entregar la mayor parte de su cosecha como tributo al faraón. Muchos trabajaban tierras que no eran suyas, sino que pertenecían a los templos, eran del faraón o de los altos dignatarios.

LA ECONOMÍA DE ÁFRICA

LA ECONOMÍA DE ÁFRICA

La economía africana, el continente olvidado, está empezando a resurgir con la colaboración de los países asiáticos y más concretamente de China. El interés que suscita África procede, principalmente, de los innumerables recursos naturales que posee. El continente africano ostenta el 99% del cromo total del mundo, el 54% del oro, el 68% del cobalto y, además, es el continente que más diamantes de calidad produce en el mundo. Es poseedor de petróleo, fundamental para el desarrollo asiático y aún más bajo la situación actual de precios elevadísimos, procesos inflacionistas y ralentización económica mundial.




Otro hecho a tener en cuenta es el dominio de idiomas europeos en el continente: hay más población francoparlante en África que en Francia, lo mismo sucede para el caso británico y portugués. Dato importante y que no pasa desapercibido para Asia de cara al desarrollo de futuros planes. Además, la mano de obra local puede proporcionar una ayuda significativa para sectores como el turismo, la agroindustria, textil, etc.
Observando estos datos y muchos más junto con las buenas oportunidades de la región se comprende el gran crecimiento que se ha producido entre los años 2004-2006 de la inversión directa proveniente del extranjero. En concreto, ha alcanzado un record histórico de 39.000 millones de dólares a la vez que las inversiones de África en el exterior se han cuadruplicado en ese mismo periodo. Este crecimiento, que venía dado en parte por las inversiones tradicionales de Hong-Kong, República de Corea, Singapur o Taiwán, ha crecido exponencialmente con la incorporación de China e India, con una implicación muy importante en el continente africano. Implicación China, acentuada tras la Cumbre África-China de 2006 en Beijing, cuando los máximos mandatarios chinos trataron con 50 jefes de Estado y ministros africanos. Desde esa fecha, sus interacciones económicas no han dejado de aumentar: entre 2000 y 2007 sus flujos comerciales pasaron de 11.000 a 57.000 millones de dólares, las inversiones chinas están presentes en 48 países africanos, y el país asiático se ha convertido en el tercer destino de exportaciones africanas.



África lo que persigue es llegar a lograr un crecimiento sostenible. Un crecimiento que venga sustentado por el incremento de productos manufacturados y que estos, a su vez, cada vez posean mayor valor añadido. Esto es necesario ya que, valiéndose tan solo de exportaciones que carecen de elaboración previa, no generaran valor suficiente y solo se crecerá mientras los recursos naturales existan y no se agoten. Es necesario, por tanto, esa transición. No es un problema de falta de recursos, sino de empleo de los mismos.
Siendo positiva la noticia, la cuestión que queda en el aire es saber si los intereses asiáticos, en forma de capital extranjero en el continente africano, ayudarán a la región a dar un salto modernizando sus industrias para afrontar la globalización o, por el contrario, solo tratará de extraer los recursos que interesen a Asia para posteriormente, cuando estos se acaben, abandonar la región sin apenas haber ayudado a su despegue, tan sólo a su explotación.


Un continente subdesarrollado

Los países africanos, especialmente en la región subsahariana, carecen de infraestructuras de transportes, de medios técnicos de producción, de industria y de sistemas financieros. Todo ello, unido a la conflictividad derivada de la pobreza y de los enfrentamientos interétnicos, que a menudo degeneran en guerras, da lugar a una situación perenne de miseria que afecta a una buena parte de la población del continente.
Por sectores, el primario es el dominante, pero la producción se centra en los cultivos de subsistencia y en los grandes monocultivos tropicales, principalmente cacao y café, explotados con sistemas anticuados y de bajo rendimiento.
El secundario casi no existe, y el terciario comienza a desarrollar, en algunos Estados, una incipiente infraestructura turística.


Recursos naturales

La pobreza de África contrasta con la abundancia potencial de sus recursos. Definidos por sectores, podemos destacar los siguientes:
Alimentación: África cuenta con tierras fértiles, praderas propicias para la ganadería, bosques y grandes bancos de pesca. La mayor parte de estos recursos están subexplotados o concedidos a empresas extranjeras.
Minería: en todo el continente abundan los yacimientos de minerales preciosos, diamantes, metales y otros recursos similares. Sin embargo, salvo en la República Sudafricana, la explotación mineral adolece de problemas similares a los de la agricultura.
Energía: los países árabes, así como Nigeria y otros Estados del África negra, explotan sus yacimientos de petróleo y gas natural. Los recursos hidráulicos, también muy importantes, encuentran, no obstante, menor grado de utilización.

Otros recursos: los paisajes, el exotismo, el legado cultural y natural constituyen recursos importantes para el sector turístico. Algunos países, como Marruecos, Egipto o Kenia han desarrollado una destacada industria de este tipo, pero en la mayor parte del continente continúa sin explotarse.




COMENTARIO
La economía de África se basa en el comercio, la industria, los recursos naturales y humanos. África es uno de los continentes más pobres.Desde un punto de vista económico, puede decirse que África es un continente aislado del resto del mundo. Aunque existen excepciones notables, como la República Sudafricana, o la mayor parte de los países del Magreb, prácticamente toda África se encuentra sumida en una grave situación de atraso y subdesarrollo. 



LA ECONOMÍA DE CUBA

LA ECONOMÍA DE CUBA

Las relaciones entre Cuba y Estados Unidos han estado estancadas por lo menos 50 años, a partir de que la revolución armada de Fidel Castro destituyó al régimen de Fulgencio Batista en 1959.
La época de Batista se caracterizó por mantener importantes acuerdos internacionales, especialmente con EU, por lo que la expulsión del entonces mandatario provocó que ese país impusiera sanciones económicas a la isla, bloqueando las exportaciones desde 1960 y endureciendo las restricciones en 1962.
Este tiempo de embargo ha salido caro, ya que la economía estadounidense pierde 1,200 millones de dólares (mdd) en ventas y el Gobierno de Cuba desaprovecha 684 mdd cada año, según señala la Cámara de Comercio de Estados Unidos.
Cuba es uno de los países más grandes del Caribe, con una población de 11.2 millones de personas, y un Producto Interno Bruto (PIB) de 68,230 mdd, que se estima crece alrededor de 2.5% anualmente, según los últimos datos del Banco Mundial (BM).



La tasa de desempleo es de 4.3% y la inflación alcanza un 6%. Su deuda pública equivale al 35.9% del PIB, mientras que la externa es de 23,440 mdd.
De acuerdo con el sitio oficial de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés), el Gobierno cubano ha tenido que implementar algunas reformas en años recientes para encontrar un balance entre la debilitación de su sistema económico socialista y el deseo de mantener el control sobre la isla.
Los ciudadanos ya tienen permitido comprar aparatos electrónicos, teléfonos móviles, así como la compraventa de autos usados; además se abrieron algunos servicios minoristas para impulsar el autoempleo.
La posibilidad de tener inmuebles y la comercialización de bienes raíces también ya son permitidas, al igual que las transacciones directas de bienes producidos por agricultores privados con hoteles y otros negocios.
El Índice de Libertad Económica de 2014 señala que Cuba continúa siendo uno de los países menos autónomos en este aspecto debido al deterioro de su libre comercio, el aspecto fiscal y monetario. Además de que todavía mantiene al sector privado bajo regulacionesestatal.
Uno de los principales sectores que componen el PIB de Cuba es el de servicios, que equivale al 73.9% y es uno de los que acapara la mayor fuerza laboral, con el 63.2%, de acuerdo con la CIA. Le sigue la división industrial que incluye hidrocarburos, farmacéutico, tabaco, construcción y maquinaria para agricultura, con el 22.3% del PIB.
La agricultura, con 3.8% del PIB, también es otro de los sectores clave al producir bienes de alta demanda como azúcar, tabaco, café y arroz.
De acuerdo con el Reporte de Desarrollo Humano de la Organización de Naciones Unidas (ONU), el intercambio comercial internacional de Cuba representa el 38.5% de su PIB y sus exportaciones alcanzan un valor de 6,252 mdd, según datos de 2013.



La isla caribeña principalmente exporta petróleo, níquel, productos médicos, azúcar, tabaco, pescado y café. Sus primordiales socios tanto en transacciones foráneas como importaciones son Canadá, China, Venezuela, Holanda, España y Brasil.

La CIA indica que las importaciones equivalen a 13,600 mdd y son especialmente de petróleo, comida, maquinaria en general y químicos. Con Venezuela mantiene un acuerdo preferente por el hidrocarburo que en parte paga con trabajadores cubanos en el país bolivariano que incluye alrededor de 30,000 especialistas en medicina.

“Ser internacionalista es saldar nuestra propia deuda con la humanidad. Quien no sea capaz de luchar por otros, no será nunca suficientemente capaz de luchar por sí mismo.”- Fidel Castro


COMENTARIO
La economía cubana actual no puede definirse como “socialista” en el sentido marxista de la palabra, esto se queda más bien en la retórica del sistema. Cuba sin embargo si conserva políticas de corte social, poco comunes en el mundo sub-desarrollado, dignos de conservarse además de una independencia política forjada a través de siglos de lucha anti-imperialista, y esto sí que no es simple retórica. En este sentido hay conquistas en Cuba que merecen se conservadas, sin embargo la única forma de que soporten los cambios por venir es que la gente se sienta participe del sistema en una mayor grado de lo que lo es en la actualidad.
Esto solo podrá conseguirlo aumentando y mejorando los cauces de participación política y promoviendo la autocrítica al sistema, prácticamente inexistente. Las desigualdades regionales adolecen de la excesiva planificación y rigidez del estado que también causa inconveniencias a la población. La desmotivación del sistema productivo natural de las economías de Estado probablemente mejoraría con la entrada del capitalismo salvaje, en perjuicio de los trabajadores por supuesto. Podría, sin embargo, buscarse con un poco de autocrítica, otras vías como el fomento del cooperativismo y el trabajo autónomo, haciendo al obrero más identificado con la producción.



LA ECONOMÍA DE FRANCIA

LA ECONOMÍA DE FRANCIA

Además de ser uno de los primeros destinos turísticos del mundo, puede afirmarse que Francia en una potencia a nivel económico reconocida mundialmente.
Posee una economía de servicio que le lleva una notable ventaja a otros sectores como son los de agricultura, pesca e industria.
Hoy ocupa el sexto lugar en la economía mundial encontrándose detrás de países como Estados Unidos, Japón, Alemania, China y Gran Bretaña, pero sólo llega al 16º lugar a nivel mundial cuando se habla del PIB por habitante.
Su moneda es el Euro adoptado como moneda única en el año 2002 y a pesar de algunos vaivenes económicos el coste de la vida en Francia puede decirse que es razonable.
Con una tasa de desempleo relativamente elevada, Francia continúa siendo un país rico y ha logrado disminuir su tasa de pobreza en los últimos años.
Con una renta media mensual que sirve para llevar una vida confortable. Además, si se realiza una comparación entre los precios y la renta dará como resultado que su coste de vida es similar al de otros países que se encuentran al oste de Europa.
Sin embargo, en algunas ciudades la vida puede resultar más costosa como es el caso de París donde es un 20% más elevada que en zonas rurales.
En Francia el gobierno juega un papel muy importante en la economía, ya que el mercado carece de regulaciones.



Por otra parte,  también se ha encargado de privatizar grandes empresas, bancos y aseguradoras, pero mantiene una presencia fuerte en algunos sectores importantes como el transporte público, energía y la industria.
El gobierno trata además,  por medio de políticas adecuadas, el  mantener una juticia social a través de sus leyes, midiendo el gasto público y la inversión en obras para la comunidad, pero en la parte fiscal su presión es una de las más altas en Europa con aproximadamente la mitad del PIB.
En los últimos años el gbierno sufrió grandes presiones sociales en contra de una reforma laboral que intentava una reactivación de la economia a expensas de la seguridad de los trabjadores.



Una economía de servicios

País pequeño en tamaño, pero Francia es una potencia económica mundial y puede jactarse de ser además el primer destino turístico del mundo. En 2004, unos 75 millones de visitantes exploraron el país. No sorprende que Francia tenga ante todo una economía de servicio. Con el 72% del empleo, el sector servicio le lleva una gran ventaja al sector primario (agricultura y pesca, 4%) y al de la industria (24%).
Siendo la sexta potencia económica mundial, por detrás de los Estados Unidos, Japón, Alemania, China y Gran Bretaña, Francia sólo llega al 16º puesto mundial en términos de PIB por habitante, un poco por debajo de la media europea.

El Euro, moneda única




El coste de la vida sigue siendo razonable

A pesar de una tasa de desempleo todavía elevada (7,7% en octubre de 2006) y difícil de combatir, Francia sigue siendo un país rico donde la tasa de pobreza ha bajado un 60% en estos últimos treinta años. La renta media mensual fue de 1500 euros en 2006. Haciendo la relación entre la renta y los precios de consumo, el coste de la vida es comparable al de los otros países del oeste de Europa. No obstante, habría que apuntar que la vida en París cuesta entre un 10 y un 20% más cara que en zonas rurales.

Algunos ejemplos de precios...

Barra de pan: entre 70 y 90 céntimos de euro
Bocadillo: entre 3 y 5 euros
Botella de agua mineral: 1 euro
Botellín de refresco: 1,50 euros
Una hora en un ciber-café: al rededor de 3 euros
Periódico diario nacional: entre 1 y 2 euros
Desayuno en un restaurante: 15 euros
Tarjeta telefónica internacional: a partir de 8 euros
Ticket de metro: 1,40 euros

“¿Es Francia la potencia exportadora del norte de Europa, o 
una economía endeudada y dependiente del Mediterráneo?
Sí a ambas.”- Francois Hollande

COMENTARIO
La economía francesa es sin embargo abierta y posee un importante lugar en el comercio internacional, tanto si se habla de exportaciones como de importaciones.
En la actualidad,  el gobierno francés ha planteado, como ya lo han hecho otros países en el pasado, la sustitución del dólar por una moneda que sea referencia internacional, sobre todo teniendo en cuenta la debilidad de la moneda norteamericana.

La propuesta de Francia es la creación de un sistema monetario donde sea posible la utilización de diversas monedas de carácter internacional.